La compra de una vivienda es una de las decisiones más importantes que toma una persona en su vida. España en este aspecto es un país atíptico en cuanto a la compra de vivienda si lo comparamos con el resto de países europeos, ya que mientras el resto de Europa tiende al arrendamiento, aquí las personas optan por invertir sus ahorros en comprar un inmuble. Según se desprende del 'IV Estudio de Comparación Online hacia el Ahorro Inteligente’ realizado por Rastreator, el 30% de los españoles ha comprado o compraría una vivienda porque es considerado una inversión segura.
A pesar de que la crisis económica demostró que no existe una inversión sin riesgo, el estudio muestra que el 62,3% de los españoles se ha comprado una casa o aspira a comprársela, e incluso uno de cada cuatro españoles afirma que ahorra o ahorraría para comprar una casa. Esta intención de tener una vivienda en propiedad se manifiesta en mayor medida entre los hombres (63,2%) frente a las mujeres (61,4%) y entre los adultos de mediana edad – de 35 a 44 años – según afirman siete de cada diez (70,6%), en contraposición a los más jóvenes – de 18 a 24 años – donde solo el 38% aspira a comprar una casa o ya lo ha hecho.
¿Cuáles son los motivos que llevan a comprar una casa?
Además de la motivación de comprar una vivienda porque lo considera una inversión segura, también hay un 28,2% de personas que compraría una casa porque paga lo mismo o más de alquiler que de hipoteca. A pesar de que España sigue siendo un país muy arraigado a la compra de viviendas, una parte importante de la población no considera esta opción. Entre los motivos por los que alegan no haber comprado una casa o no anhelar a comprarla, la razón primordial es no poder permitírselo económicamente, tal y como afirma un 22,4% de los españoles. Además, un 8,5% no quiere comprar una vivienda porque no quiere endeudarse y un 6,8% porque no quiere atarse a ningún lugar concreto.
En cuanto a las diferencias por género, son precisamente las mujeres las que consideran en mayor medida la compra de una vivienda como una inversión segura (30,8% ellas vs. 28,7% ellos), pero también son las que menos pueden permitírselo económicamente (23,1% mujeres frente al 21,7% hombres). Por su parte, los hombres son los que más aprovecharían la subida de los precios del alquiler (29,2% ellos vs. 27,1% ellas), pero también los que menos quieren atarse a un lugar concreto mediante la adquisición de una casa (7,1% hombres frente al 6,5%).
Y en lo referente a las discrepancias generacionales, los adultos de entre 55 y 65 años son los que más ven la compra de una vivienda como una vía de inversión segura (36%) y los de entre 35 y 44 años los que más aprovecharían la subida de los precios del alquiler (35,2%), mientras que, como resulta lógico, los jóvenes de entre 18 y 24 años son los que menos pueden permitirse comprar una casa(41,2%) y también los que menos ataduras querrían tener (el 11,8% no compraría una casa para no atarse a un lugar)